• Descargar / Imprimir

Las vías de transmisión de los distintos sistemas de telecomunicaciones han evolucionado drásticamente en los últimos decenios. Las limitaciones impuestas por la tiranía del cable para transmitir las señales han sido superadas mediante la combinación de satélites con antenas terrestres.

Las señales emitidas por radio, televisión o teléfonos móviles, recogidas por un satélite en órbita sobre la tierra, vuelven a ser retomadas por antenas repetidoras que son las encargadas de difundirlas a los aparatos receptores. La multiplicación reciente de operadores de todos estos sistemas de comunicaciones ha implicado también la extensión de antenas por todo el territorio, incluyendo el interior de las ciudades. Las mejores localizaciones son en terrenos altos o despejados, para garantizar una cobertura más amplia.

En la serie de fotografías puede apreciarse la lógica de las ubicaciones de distintas antenas de televisión y móviles en diferentes emplazamientos. En territorios accidentados o montañosos, como la comarca Terra Alta en Cataluña, las dificultades para garantizar una perfecta cobertura de las distintas cadenas de televisión a los núcleos de población son mayores, y por ello debe aumentar el número de repetidores.